Ricardo Castiglia: Cosmovisión

¿Cosmovisión?

Castiglia ha entrado hoy de lleno (y por fin)  a la atmósfera seductora y compleja de la danza ceremonial, y en una nueva serie testimonial, reconstruye y resignifica el espacio de abrigos y cuevas rocosas.

Centrado en las pinturas rupestres del Parque arqueológico La Tunita, ubicado en la Sierra de Ancasti (y también algunas de Cerro Colorado, en la provincia de Córdoba), abre una ventana al ocultismo y re-interpreta a su modo la cultura de La Aguada. Siendo de las más importantes y representativas del noroeste argentino, consideradas como el momento culminante del arte precolombino, se desarrollaron en la región fronteriza entre las provincias argentinas de Catamarca y La Rioja, entre el 600 y 900 de nuestra era.

El medio natural es atravesado por los ríos Los Molinos y Chico, no está disociado y cobra vida propia. En un sitio tan particular y de gran valor biológico, rodeado por un bosque de cebil, donde la erosión ha formado galerías y aleros, la composición estética va desde lo oscuro hacia lo trascendente, y se difumina. Y mientras, toda la obra se eleva, y el arte se transforma así en un proceso de construcción de mundos.

¿Danza ritual?

El ámbito de lo sobrenatural ocupa un lugar preponderante de la cosmovisión ligado al mundo social. La Ceremonia tiene su Escenario. El espacio es concreto y se sitúa en ámbitos sagrados del territorio. Con un grado de perfección notable, el poder chamánico de la “Sixtina" del Ancasti se despliega con sus icónicos felino - humano. Inquieta e irrita, y la realidad se diluye. Las danzas recrean experiencias sensoriales. La anatropía desvía la mirada hacia arriba del eje visual, y se percibe cierta ambigüedad formal.

Un tanto draconianos y severos los personajes centrales aparecen festivos, cuasi humanos, míticos, muy ataviados, con tocados o máscaras portando tiraderas, hachas, y lanzas. Los cuerpos se convierten así en artefactos conceptuales y comunican un estado emocional de trance o ferocidad. Las miradas hipnóticas no resultan indiferentes. En este contexto, es también posible - y se sospecha, un diálogo entre las imágenes y los participantes del rito.

Los colores y el brillo no son adornos. El blanco "impuro" (virando hacia el rosado) aparece de otra manera ante nuestros ojos. La espesa capa pigmentaria busca lo tridimensional, reforzando la singularidad de las grandes siluetas humanas.

¿La Tunita? ¿El Guerrero? ¿El Brujo?

Son  obras en sí mismas, no son un mero telón de fondo. Como parte sensitiva del ritual, el espectador se sumerge en una visualidad de alto impacto para los sentidos.

Las figuras generalmente se muestran en movimiento y acción. De esta forma, se expone una creatividad representacional que las distingue completamente.

Algunas imágenes antropomorfas parecen corporizarse, y se despliegan como repertorio iconográfico de un alto contenido simbólico. Cada gesto supone un diálogo íntimo entre su productor y la materia, del que también participa el soporte en sí mismo.

La kinésica y la proxémica aportan al análisis, y permiten conjugar y explorar las dimensiones del cuerpo, el movimiento, y la vulnerabilidad.

¿Su fuente de inspiración?

Castiglia no trabaja solo. Su Labor está siendo Asistida Amorosamente, y a través de esta cooperación, la obra de arte supone la Existencia.

Es interesante observar que aquí no es posible la figura del artista como genio creador. Su papel no constituye una especialización. Es el producto de un trabajo pautado y colectivo de preparación y confección de los motivos, atendiendo a todo lo que pueda interferir, aumentar o modificar el efecto estético. Dilucida además la posible participación de circuitos caravaneros.

Las imágenes debieron estar retenidas en la memoria, producidas y reproducidas en el tiempo y espacio. Todo lo que sucede es atribuido a divinidades que aparecen en sueños o visiones, interconectando mundos y seres diferentes, permitiendo en una segunda lectura la construcción de identidades locales.

¿El Salvador?

Presente el Fuego Sensual. El que alimenta, el que nutre, el que arrasa. El Fuego como elemento fundamental de la conciencia de toda la Vida. El Supremo Salvador. Forma parte de la vida cotidiana y quema todos los pecados. Opera y disuelve el dolor de los cuerpos.

Se tiene con el fuego una relación de eternidad, simple y personal.

Más cerca de la contemplación del arte por el arte, se torna impreciso y se funde con los roles que las pinturas habrían desempeñado en las prácticas suscitadas en torno a ellas.

Pero al fin y al cabo, muestra esta singular y natural belleza de la vida.

Bernardita Bielsa
Comisario de Arte

Ricardo Castiglia

Nací en Colonia Caroya, provincia de Córdoba, y he vivido la mayor parte de mi vida en la ciudad de Córdoba (Argentina). Resido desde 2018 en España, y en 2021 el proyecto que veníamos gestionando con mi pareja Bernardita Bielsa, fue seleccionado por HolaPueblo y gracias a esta iniciativa y al apoyo del Ayuntamiento, nos instalamos como repobladores en Arroyomolinos de León, un pequeño pueblo de tan sólo 960 habitantes de la provincia de Huelva. Nace así  TarimaLab /Arte, cultura y vida rural.

Soy Maestro de Artes Plásticas y Profesor de Dibujo y Grabado. Poseo una larga trayectoria como profesor universitario en la Facultad  de Arte  de la Universidad Nacional, Escuela Superior de Bellas Artes Dr. Figueroa Alcorta; Escuela Superior de Diseño Lino Eneas Spilimbergo, y Escuela Superior de Cerámica Enrique Arranz.

Tengo además una completa formación de posgrado; antecedentes en investigación, producción y publicaciones académicas y/o artísticas; he dado conferencias, presentaciones en eventos internacionales y organización y gestión de eventos artísticos de la universidad; he dirigido trabajos finales de grado de cientos de alumnos; he actuado como jurado Integrante de Comisiones Evaluadoras de trabajos finales, jurado de Salones de Artes Plásticas, y veedor de jurados.

He trabajado por 30 años como gestor cultural en la Secretaría de Cultura de la Provincia de Córdoba (Argentina) en diversas áreas del Teatro San Martín, del Museo Provincial de Bellas Artes Emilio A. Caraffa, Sala Farina, y del Museo Histórico Provincial Marqués de Sobremonte.

Desde el inicio de mi carrera - allá en septiembre de 1977, expongo como artista  individual y colectivamente, he participado en importantes salones nacionales y provinciales, y he recibido premios y menciones nacionales e internacionales. Además mi obra se encuentra en colecciones privadas, galerías y museos.